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Redacción.-La metformina para perder peso se ha comenzado a emplear por muchas personas, sin embargo, este medicamento podría causar efectos secundarios y contraproducentes como el llamado «rebote».
La metformina es un medicamento empleado para controlar los niveles de glucosa en las personas diabéticas del tipo 2, este medicamento está enfocado a disminuir la cantidad de glucosa que absorbe de sus alimentos y la cantidad de glucosa que forma su hígado.
Entre los riesgos de usar la metformina para la pérdida de peso se encuentra que el cuerpo podría comenzar a presentar resistencia a la sustancia que contiene el medicamento y si en un futuro la persona que lo toma para la pérdida de peso desarrolla diabetes tipo 2, el medicamento no le funcionará.
El medicamento sí podría ayudar a la pérdida de peso ya que retrasa la absorción de la glucosa (que da energía al cuerpo y suele almacenarse en forma de grasa) y reduce el apetito por lo que es usada para perder peso, sin embargo este medicamento no es recetado para eso.
Podría provocar también efectos adversos en los riñones, sistema digestivo, estreñimiento, flatulencias, indigestión, diarrea, hinchazón y dolor de cabeza.
El uso de pastillas para bajar de peso no es recomendado, ya que podrían causar el efecto «rebote» que es cuando el cuerpo recupera el peso perdido y un poco más cuando se dejan de consumirlas. Una pérdida de peso efectiva se logra cambiando los hábitos alimenticios y realizando ejercicio de manera constante.
Si bien existen pastillas que pueden ayudar a la pérdida de peso, estas no funcionan de la misma manera en todas las personas y su uso debe estar prescrito por un médico tras una valoración previa.
Otros fármacos que la gente utiliza erróneamente para la pérdida de peso son los derivados de las metanfetaminas, que inhiben el hambre cuando se consumen en dosis bajas, pero que resultan adictivas y peligrosas para la salud.
Se estima que A nivel mundial, el 13% de los adultos son obesos y el 39% están excedidos de peso, lo que les eleva sus riesgos para una gran cantidad de problemas cardíacos.
Ponerse a dieta y hacer ejercicio es lo primero que recomiendan los médicos, pero a veces son necesarios los medicamentos para quienes tienen un grave exceso de peso, o los que no pueden perder peso de otra forma. Fuente: Debate (iM-rcc)